Hable por si mismo, dice un sobreviviente de cáncer de colon
Amy Rainey sabía que algo no estaba del todo bien cuando ella no podía quitarse el constante malestar en su abdomen. Primero, ella pensó que su premenopausia podía haber causado cambios en la manera en que su cuerpo digería los alimentos. Pero cuando se presentó sangrado en sus heces fecales en enero del 2020, Amy sabía que necesitaría atención médica.
Los síntomas de Amy no encendieron inmediatamente la alarma con su doctor. Ella no tenía ningún familiar con historial de cáncer. A la edad de 45 años, las posibilidades eran una enfermedad autoinmune, inflamación o el síndrome de colon irritable. Un cambio en la dieta, en las actividades y en el medicamento pudieran aliviar sus síntomas.
Pero Amy pidió que inmediatamente le hicieran un examen de detección de cáncer del colon. Como profesional de investigaciones clínicas, ella sabía la importancia de abogar por ella misma. Eso significaba, haciendo preguntas, pidiendo otra opinión y no ignorando las señales de aviso.
La detección temprana es importante con el cáncer colorrectal
La mayoría de las personas de menos de 50 años piensan que no tienen que preocuparse sobre el cáncer colorrectal. Sin embargo, los casos están en aumento en adultos jóvenes. Los casos de cáncer de colon en adultos de menos de 50 años han aumentado en un 55 por ciento desde 1995.
Los exámenes de cáncer colorrectal ahora están disponibles para adultos con promedio de riesgo empezando a la edad de 45 años. El cambio de bajar la edad para comenzar los exámenes, se basa en las recomendaciones del American Cancer Society, American College of Gastroenterology y de United States Preventive Task Force.
Colaboración entre el paciente y el proveedor
La edad no fue el principal factor para que Amy solicitara una colonoscopia. Ella sabía que el cáncer sucede a cualquier edad. Ella también sabía que entre más temprano se diagnostique el cáncer, son más las opciones de tratamientos que están disponibles.
Amy siguió adelante, aun con las restricciones en medio del interminable COVID-19, para obtener respuestas sobre qué era lo que estaba pasando en su cuerpo. Con una remisión de su médico de cabecera a Goshen Physicians Gastroenterology, ella programó visitas virtuales con el Gastroenterólogo Ross Heil, DO. El programó a Amy para tener una colonoscopia en el Goshen Surgery Center tan pronto se reanudaron los procedimientos ambulatorios.
"La patología fue inconclusa," dijo Amy. "Pero Dr. Heil dijo, 'yo sé lo que vi.'" Esto le dio a Amy la confianza de tener otro examen en Goshen Hospital con más herramientas de diagnóstico disponibles.
La segunda colonoscopia resultó en un diagnóstico – Adenocarcinoma del colon etapa 2B. Es el tipo más común de cáncer colorrectal. El cáncer comienza en células que producen mucosidad para lubricar la parte interior del colon y del recto.
Para Amy, la extirpación de una parte del colon era la opción obvia del tratamiento. Ashley Hardy, MD, Oncóloga Quirúrgica en Goshen Center for Cancer Care, removió más o menos un pie (30.48 centímetros) del intestino de Amy. Amy salió de la cirugía con buenas noticias que la cirugía había salido bien y que los márgenes alrededor del sitio de las lesiones estaban limpios. Ella podía esperar recuperarse a tener evacuaciones normales en pocos días.
La prognosis fue una noticia bienvenida por Amy y su esposo, quien fue su mayor apoyo. Ellos fueron afortunados de tener familia en el área de Goshen que pudieron ayudarlos en el cuidado de sus dos hijos pequeños mientras Amy se recuperaba.
Hoy, Amy considera que tiene una misión para difundir que la detección temprana cambia completamente los resultados. Ella también quiere enseñarles a otros a que aboguen por ellos mismos y de hablar sobre su necesidad de encontrar respuestas claras.
"Usted es el experto de su propio cuerpo," ella dijo. "Confíe en usted mismo y no tenga miedo de hacer preguntas hasta que obtenga respuestas con las que usted esté satisfecho."
Amy también sabe la importancia de la medicina preventiva. Con el cambio de edad a una edad menor para comenzar los exámenes de detección del colon, Amy ya ha programado para su esposo su primera colonoscopia tan pronto él cumpla 45 años este año.